* Fue arrollada afuera de la terminal del ADO y sufrió una fractura (oblicua) parcial en el inicio de la tercera porción
Sergio Aldazaba
Veracruz, Ver., 24 de abril de 2025.- Integrantes del proyecto Zarigüeyas de las Altas Montañas dieron a conocer que una de las serpientes que fue atropellada por un taxista afuera de la terminal del ADO, si sufrió una fractura y hasta el momento Servicio de Taxis de la Central de Autobuses de Veracruz (SERTACAVER) no se han hecho responsables.
El ejemplar que es usado para la concientización sobre la vital importancia de la vida silvestre, tiene una fractura (oblicua) parcial en el inicio de la tercera porción, dieron a conocer mediante su página.
Luego de que fue llevada ante un médico veterinario especialista y le hicieron los estudios de radiografía correspondiente, finalmente lograron saber con certeza la gravedad de las heridas internas.
Así mismo, dieron a conocer que el taxista ya está identificado y es quien responde al nombre de Juan Carlos Sandoval García perteneciente a SERTACAVER, quienes brindan el servicio exclusivo en la central camionera.
Los hechos ocurrieron el pasado 19 de abril cuando recién llegaban a la ciudad para una exhibición de vida silvestre en el Coyol y el conductor se llevó por delante y entre las llantas los terrarios y consigo los ejemplares.
En su momento denunciaron públicamente que el operador simplemente se rio de la situación, les dijo que le tomaran las fotos que quisieran ya que no le importaba y huyó de ahí para evadir sus responsabilidades.
Actualmente Zarigüeyas de las Altas Montañas piden al conductor y a su concesionaria que se hagan responsables de los gastos médicos y de tratamiento de la serpiente para evitar llegar hasta las instancias legales.
Cabe señalar que cuando el hecho se dio a conocer en redes sociales, comenzaron a circular publicaciones anónimas en grupos de facebook donde señalaban que el taxi había sido robado, lo cual denotaba aparentes intenciones de victimizarse y no hacerse cargo de lo ocurrido señalaron usuarios.
