El magistrado del Tribunal Estatal de Conciliación y Arbitraje, Antonio Sobrevilla Castillo, ha construido una sólida reputación dentro del Poder Judicial no solo por su desempeño profesional, sino también por sus cualidades personales. Su humildad y trato respetuoso lo distinguen en un entorno donde muchas veces imperan las formas rígidas y distantes.
Es un conocedor profundo del ámbito judicial. Su trayectoria ha estado marcada por la constancia académica y el compromiso con el estudio del Derecho, lo que lo convierte en una voz autorizada en temas de conciliación y arbitraje. Esta formación, sumada a su don de gentes, le ha permitido generar simpatías tanto entre sus colegas como entre quienes interactúan con él en dicha Soberanía y desde otras esferas del servicio público.
No lo pierdan de vista, porque todo indica que comenzará a recorrer el estado de Veracruz. Por lo pronto, quienes conocen su estilo afirman que su caminar será discreto, pero firme, como ha sido siempre su forma de ejercer el servicio público: con vocación, mesura y preparación.
