* Los manifestantes denuncian una crisis educativa y de convivencia por la presencia de dos maestros acusados de agresiones psicológicas contra alumnos y tutores

* Lamentaron que, pese a las denuncias, sus demandas han sido ignoradas, causando el traslado de más de 40 niños a otras escuelas

* “No vamos a permitir que sigan destruyendo la educación de nuestros hijos”, advirtieron

 

Manuela V. Carmona/ corresponsal en Orizaba y municipios de las Altas Montañas

Tequila, Ver., 31 de marzo del 2025.- Padres de familia de la escuela primaria Lic. Adolfo López Mateos, ubicada en la Avenida Chapultepec del Barrio de San Antonio, en el municipio de Tequila, tomaron este lunes las instalaciones y bloquearon la vialidad en demanda del cambio de dos docentes.

De acuerdo con los manifestantes, la institución enfrenta una grave crisis educativa y de convivencia debido a la presencia de dos maestros acusados de agresiones psicológicas contra alumnos y padres de familia.

Lamentaron que, pese a las múltiples denuncias, las autoridades educativas y municipales han ignorado sus demandas, lo que ha provocado que más de 40 niños sean trasladados a escuelas de otros barrios.

Agregaron que, desde hace cuatro años, han solicitado por vías pacíficas y conforme al reglamento la remoción de los profesores señalados, quienes presuntamente hostigan a los estudiantes y a sus familias.

Según testimonios, los docentes castigan a los niños en represalia por las quejas y cuentan con el respaldo de la supervisión escolar y el Ayuntamiento, que se han negado a intervenir. Actualmente, la escuela solo cuenta con 18 alumnos atendidos por tres profesores, dos de los cuales son señalados como responsables del clima de intimidación.

“Nuestros hijos tienen derecho a estudiar en un ambiente seguro, pero estos maestros los amedrentan y nadie hace nada”, denunció un padre de familia.

La situación ha llevado a decenas de familias a inscribir a sus hijos en escuelas de otras comunidades, como Tecuanca, para evitar el maltrato. “¿Acaso es necesario que nuestra infancia tenga que abandonar su propia comunidad por culpa de dos agresores?”, cuestionaron los afectados.

Ante la indiferencia de las instancias locales, la comunidad hizo un llamado urgente a las autoridades estatales y a la opinión pública para visibilizar el caso y exigir justicia. “No vamos a permitir que sigan destruyendo la educación de nuestros hijos. Pedimos ayuda para que esta situación no quede impune”, expresaron.