El problema con Donald Trump no son las barbaridades que dice en campaña, es que si gana puede transformar esas barbaridades en políticas públicas.
Como es un discurso fácil y pegador, le gusta ensañarse con México. Ya amagó con la deportación más grande de la historia, con terminar el muro y hacerlo más grande, con contratar otros 10 mil agentes de la Patrulla Fronteriza, con pedirle al Pentágono que mande fuerzas especiales para atrapar a los capos y ayer sentenció que si gana la elección México no podrá vender ni un solo auto a Estados Unidos.
La elección de noviembre está en el aire. Trump puede ganar y empezar un periodo realmente sombrío para el país. A Donald le interesa atraer votos, si tiene que hacerlo a base de mentiras o medias verdades es lo de menos. | Se destaca en “Pepe Grillo” de La Crónica.
