Mientras la ministra presidenta Norma Piña rendía su informe en el Pleno de la Corte, con un discurso centrado en la independencia judicial como garantía del Estado de Derecho, a unos pasos, en Palacio Nacional, por primera vez en la historia el presidente designaba directamente y sin la legitimidad popular que da el Senado, a una nueva ministra, Lenia Batres, militante activa del partido en el poder. Nos cuentan que, si a doña Norma la ovacionaron los asistentes a su informe, incluido el exministro Eduardo Medina Mora, que renunció en 2019, en el caso de doña Lenia es de pronóstico reservado la forma en que será recibida por sus nuevos compañeros porque, nos recuerdan, durante sus comparecencias en el Senado criticó en modo áspero los ingresos de los ministros y dijo estar en favor de una reforma para que los integrantes del máximo tribunal sean elegidos por voto popular. A ver cómo se pone el ambiente interno. | Se puede leer en “Bajo Reserva” de El Universal.