La lectura de la foto de López Obrador y sus corcholatas, incluido en el elenco el senador Ricardo Monreal, sonriente como pocas veces, es que el presidente de la República y jefe político de Morena, quiere conservar la unidad de su movimiento tanto como sea posible.Que nadie se baje antes de que se levanten las encuestas para elegir candidato presidencial; cuyo resultado, así es esto, el presidente ya conoce.
El presidente puede presumir que consiguió llegar a mediados del 2023 con la sucesión presidencial como un tema exclusivo de morenistas. Lo han acaparado totalmente.
Pero la verdad es que su movimiento está destinado a descarrilarse porque la decisión sobre el relevo está tomada y la pregunta es: ¿Hasta dónde llegarán los que ya saben que perderán? Faltan menos de 100 días para saberlo.
Porque una cosa es patalear y otra cosa, distinta, romper. De eso depende si se ponen en riesgo, o no, las posibilidades de triunfo. Por ahora es complejo saberlo porque del otro lado, en la acera de enfrente, en el terreno de la oposición, no hay nada. Es un desierto donde el viento arrastra cachanillas.I Se lee en Pepe Grillo-Cronica